Es una vía compuesta por dos (2) calzadas: cada una de ellas con dos (2) carriles de circulación en el mismo sentido de tráfico y dos (2) carriles en dirección opuesta, espaciados por un separador en el centro por lo general en concreto. Esta doble calzada está construida para asegurar una mejor movilidad y circulación para los vehículos que la transitan.